Construcción de mejores entornos.

El escenario es quizá común, el catedrático revisa una tarea y se da cuenta que está muy bien redactada, tal vez demasiado bien para el nivel del alumno, al ser un poco más inquisitivo y recurrir a Internet, descubre que el alumno ha copiado y pegado una página completa. En ese momento son dos las preguntas que posiblemente cruzan por la mente del consternado docente ¿Por qué la insistencia de usar Internet como única fuente de información? ¿Por qué copiar y pegar páginas completas ?

Aunque hay muchas respuestas, existe una que rara vez se considera: Porque pueden. La proliferación casi viral de sitios de consulta, habilita dentro del entorno del estudiante (en este caso de comunicación) la creencia en un recurso que parece ilimitado e irrestricto; el estudiante copia porque puede, porque en su entorno la conducta es alentada y es precisamente el entorno, lo que habría que modificar en primer lugar.

Desde la perspectiva de Gregory Bateson (1) se modifican entornos para modificar conductas y de ahí las capacidades del estudiante de comunicación, lo que se plantea entonces como reto con enfoque constructivista, es precisamente construir un entorno que motive mejores prácticas de investigación en el estudiante. Las opciones son muchas pero en un comienzo se pueden proporcionar fuentes de información como revistas digitales y portales de investigación, posteriormente se podrá pensar quizá en el desarrollo y cooperación con otras universidades a través de plataformas de Entorno de Aprendizaje abierto o plataformas privadas de E-Learning. La idea en esta postura es no “satanizar” los medios o luchar contra el entorno, sino hacerse de los medios y el entorno para formar mejores conductas y prácticas de investigación más éticas dentro del ejercicio del derecho a la información.